El camino de Universidad de Chile al título fue con muchos ripios, pero cuando encontraron su fútbol comenzaron a alzarse rápidamente en la tabla y, en la penúltima fecha, llegaron al liderato para finalmente quedarse con el título y su estrella 18.
En la primera fecha, el equipo de Guillermo Hoyos hizo su estreno ante Deportes Iquique. Cayeron inapelablemente por 2-0 en el norte del país, demostrando que había mucho trabajo que hacer.
En la segunda jornada, llegó la primera celebración azul, al vencer por 1-0 a Deportes Temuco en el Estadio Nacional, pero a la semana siguiente perdieron por 2-1 en su viaje a Talcahuano ante el local Huachipato.
Una igualdad 0-0 frente a Everton comenzó a poner en jaque el trabajo de Hoyos al mando de la U, pero el revitalizador triunfo por 3-1 contra Palestino marcó un antes y un después en la campaña del elenco estudiantil.
Una clara victoria por 3-0 sobre Audax Italiano en la sexta fecha y un sufrido triunfo por 2-1 ante Unión Española demostraba que los azules comenzaban a encontrar su camino para repuntar en un torneo donde el clásico rival, Colo Colo, era quien lideraba.
Un tropiezo en su visita a Universidad de Concepción (0-0) sembró algo de dudas de cara al Superclásico. En ese compromiso los azules dominaron gran parte del duelo jugado en el Estadio Nacional, pero terminaron igualando 2-2.
Se recuperaron de esa laguna futbolística con un trabajado triunfo contra Deportes Antofagasta (1-0) en el norte, para luego imponerse por 2-0 ante un atribulado Santiago Wanderers en Santiago.
Llegó el clásico universitario, donde los azules tenían la buena opción de trepar a la cima, pero un equipo mixto de U. Católica le propinó una dura derrota por 3-1 en San Carlos de Apoquindo por la duodécima fecha.
Los laicos no bajaron los brazos y golearon a Cobresal por 4-0 en el coliseo ñuñoíno y en el duelo más importante del Clausura, en la penúltima fecha ante O'Higgins, se impusieron con justicia por 3-0 y aprovecharon el tropiezo de Colo Colo con Deportes Antofagasta para tomar la punta.
En la última jornada, los estudiantiles vencieron a San Luis por 1-0 y permitieron a toda la fanaticada azul celebrar con algarabía en casa la estrella 18 del firmamento azul, algo que al comienzo del Clausura parecía una quimera.
El 24 de mayo de 1927 se fundó el Club Universidad de Chile, producto de la fusión de Atlético Universitario y Náutico Universitario, los dos equipos que representaban a la prestigiosa casa de estudios fundada por Andrés Bello. Su ligazón con ésta ayudó para que desde sus inicios se transformase en uno de los equipos más populares del fútbol chileno.
Dieciocho son los títulos que tiene en su historia: 1940, 1959, 1962, 1964, 1965, 1967, 1969, 1994, 1995, 1999, 2000, 2004, Apertura 2009 y Apertura 2011, Clausura 2011, Apertura 2012, Apertura 2014 y Clausura del 2017. Además, la U ostenta tres torneos de Copa Chile (1979, 1998 y 2000) y una Copa Sudamericana (2011).
Una de las etapa más gloriosa de los azules fue entre 1959 y 1969, década en la que se consiguieron seis campeonatos y se conformó un sólido equipo que se inmortalizó con el nombre de "Ballet Azul".
Por el contrario, la etapa más agria del elenco "laico" fue a fines de la década de los '80, cuando el club descendió a la Segunda División, de la mano de un novel técnico Manuel Pellegrini. Sin embargo, este episodio fuera de afectar a la popularidad del equipo, la fortaleció.
A fines de siglo, de la mano de César Vacchia, el elenco estudiantil tuvo otra destacada etapa en la que logró el impresionante récord de 33 partidos invicto, racha que no ha sido superada por ningún otro equipo nacional.
El 2007 surge Azul Azul S.A. la concesionaria que administra los derechos comerciales y financieros del fútbol profesional y formativo de Universidad de Chile. Es bajo esta administración que la institución azul consigue en 2011 su primera copa internacional, al alzar la Copa Sudamericana.
El equipo de Jorge Sampaoli ganó el torneo de forma invicta y logró el hito de ser el campeón sudamericano de mejor rendimiento en 42 años. A eso se le debe sumar el tricampeonato obtenido a nivel nacional que transformaron a este equipo azul en uno de los más exitosos de la historia.
Luego de ese trofeo, la U conquistó el Apertura 2014 de la mano del profesor Martín Lasarte, quien inexplicablemente fue sustituido por Sebastián Beccecece, en una apuesta que le trajo pocos réditos al equipo estudiantil. Tras un periodo con Víctor Hugo Castañeda, quien clasificó al equipo a la Sudamericana, llegó Angel Guillermo Hoyos.
El argentino le devolvió la mística al conjunto "laico" y ayudó a disputar el torneo desde la parte baja, con un arranque irregular, que paulatinamente le sirvió para colocarse como líder en la penúltima fecha, aprovechado un traspié de Colo Colo, para levantar la copa número 18 para el club universitario.